Elegía rota

Tantas cosas que sigo sin entender
desde que abandoné tu cuerpo,
ignorante del destino que me esperaba
bajo otros cielos, bajo otras miradas
y lejos de ti...
No entiendo que duela tanto confesar
lo que sé que haría y no puedo hacer,
las miles de horas que gastaría en ti
y los segundos que pasarían entre una caricia y otra,
los días que, grises, vagarían en mi vida
como pordioseras manchas de indiferencia,
y no lo entiendo,
será que eras tú quien me hacía verlo todo distinto
quien me arrancaba la niebla de los ojos,
será...
Las antorchas que se apagaron para siempre
en la carretera que recorrí tantas veces,
y ahora olvidé, el recorrido funesto,
el atropello, la huida
la tensión del amor reventado,
amor,
no lo entiendo...
Extendiste tu mano hacia mi,
y me amaste,
y nunca lo comprenderé,
porque me odio
me odio por perderte,
por amarte en una tumba en la que no estoy yo
en la que esperas como en un interrogante infinito,
una llamada que no sé si la juventud,
la vida o el secreto podrán hacerte,
una llamada que te dará el código para comprender,
lo que pasará desde aquí,amor,hasta mi muerte.
Una llamada al foso que debería ocupar mi cuerpo y no el tuyo,Elena, mis manos y no las tuyas...
Y no entiendo como podía caber tanto amor en el mundo pequeño de dos adolescentes.
Fue un milagro que podremos sublimar siempre...
...aunque nadie nos entienda.