martes, 12 de agosto de 2008
Afirmación II
Nadie hay más infeliz,
que aquel que,
sin saberlo,es llevado
por si mismo,
a las fauces mismas del averno.
Aquel que no escribe cuentos,
siquiera en su cabeza,
ni fantasea con la muerte,
delicia sonora,
no tiene corazón tan vivo
como el que vive,melancólico,entre
purpureas lineas de vida
y sinrazón.
El que sigue,manso,el camino
prefijado,
y no se interna en campos dorados
ni ve la luna por temor a tropezar,
el que no sueña...amor;
no vive,y lo sabemos...
Por eso amar es recorrer una vía paralela,
de la mano,seguro,pisar hierba fresca
y no temer al lobo ni a la noche,
a la brisa ni a la tormenta...
Nadie es tan feliz como el que es llevado,
consciente,
en los brazos azules de la amada.
que aquel que,
sin saberlo,es llevado
por si mismo,
a las fauces mismas del averno.
Aquel que no escribe cuentos,
siquiera en su cabeza,
ni fantasea con la muerte,
delicia sonora,
no tiene corazón tan vivo
como el que vive,melancólico,entre
purpureas lineas de vida
y sinrazón.
El que sigue,manso,el camino
prefijado,
y no se interna en campos dorados
ni ve la luna por temor a tropezar,
el que no sueña...amor;
no vive,y lo sabemos...
Por eso amar es recorrer una vía paralela,
de la mano,seguro,pisar hierba fresca
y no temer al lobo ni a la noche,
a la brisa ni a la tormenta...
Nadie es tan feliz como el que es llevado,
consciente,
en los brazos azules de la amada.
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1 comentario:
Precioso Albe, y con mucha razon en sus letras!!
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