martes, 7 de julio de 2009
"Los Poetas de la antigüedad animaron todos los objetos sensibles con Dioses o Genios, nombrándolos y adornándolos con las propiedades de bosques, ríos, montañas, lagos, ciudades, naciones, y todo lo que sus dilatados y numerosos sentidos podían percibir.
"Particularmente, estudiaron el genio de cada ciudad y país, colocándolo bajo la potestad de su deidad espiritual.
Hasta que se estableció un sistema, del que algunos sacaron provecho, y esclavizaron al vulgo con el intento de dar realidad o abstraer las deidades mentales de sus objetos: así comenzó el Sacerdocio, escogiendo formas de culto de entre los relatos poéticos.
"Finalmente, dictaminaron que los Dioses mismos así lo habían dispuesto.
Así fue como los hombres olvidaron que Todas las deidades residen en el corazón humano."
W. Blake
La rosa enferma
Estás enferma, ¡oh rosa!
El gusano invisible,
que vuela, por la noche,
en el aullar del viento,
tu lecho descubrió
de alegría escarlata,
y su amor sombrío y secreto
consume tu vida.
"Particularmente, estudiaron el genio de cada ciudad y país, colocándolo bajo la potestad de su deidad espiritual.
Hasta que se estableció un sistema, del que algunos sacaron provecho, y esclavizaron al vulgo con el intento de dar realidad o abstraer las deidades mentales de sus objetos: así comenzó el Sacerdocio, escogiendo formas de culto de entre los relatos poéticos.
"Finalmente, dictaminaron que los Dioses mismos así lo habían dispuesto.
Así fue como los hombres olvidaron que Todas las deidades residen en el corazón humano."
W. Blake
La rosa enferma
Estás enferma, ¡oh rosa!
El gusano invisible,
que vuela, por la noche,
en el aullar del viento,
tu lecho descubrió
de alegría escarlata,
y su amor sombrío y secreto
consume tu vida.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario