viernes, 3 de julio de 2009


El amor es un acto de sangre
y yo sangro,
sangro por cada centímetro,
por cada orificio,
por los ojos tras mirarte
por mi boca tras llamarte...
Por la frente tras pensarte,
por los oidos tras oirte;
y todo es sangre
resbaladiza, negra
caliente y vaporosa sangre,
de las maltrechás vías de mi anatomía,
sangre revuelta, vomitada
sangre muerta o moribunda
sangre triste y corrompida
sangre densa y amarga.
Sangre de víspera de muerte
y líquido matriz de la inconsciencia...
...litros de sangre sucia,
podrida de días y días...
pero toda mía.

Toda...mía.


4 comentarios:

Borrasca dijo...

No me digas que sigues en el infierno...

Aunque la verdad, me gusta leerte así, sencillamente desgarrador y creo que algo tengo de sádica...

Besos borrascosos y mucho ánimo.

PD: Espero que coincidamos pronto, mira que ya en esto me regreso a España y hasta ahí podré seguir dando saltos por estos lares

Aída dijo...

Qué bonito!!
Los poemas que publicas son tuyos?
Si es así, ENHORABUENA!

Saludos.

Alberich dijo...

Si está etiquetado como "mis poemas" es q es mío
;)
gracias por pasarte,Dra.
Me alegra compartir la pasión por la medicina.

marcela dijo...

encuentro una conexcion entre tus estados y los mios, es increible das en la tecla como si me conocieras...
eres especial te mando saludos.