viernes, 18 de julio de 2008

"Los amantes de todos los Santos"

Las escenas de Los amantes de Todos los Santos se reparten entre Francia y Bélgica, países donde Juan Gabriel Vásquez ha pasado varios años de su vida. Pero sus preocupaciones son universales: el amor y el desamor, la soledad y la culpa.
Estos siete cuentos intensos y conmovedores se han convertido por derecho propio en parte de mi vida. Y es que me parece realmente dificil mantener tal nivel en todos y cada uno de los relatos que configuran esta maravillosa obra maestra de la literatura contemporanea en español.

Ejemplos: Un escritor colombiano es testigo de una muerte que no le afecta, pero que lo marcará para siempre. Un cazador aficionado intenta conservar su matrimonio mientras se queda a dormir en casa de una desconocida. En el curso de una noche larga, el hijo de un célebre jinete verá cómo su vida cambia por culpa de un encuentro imprevisible...
Todos los personajes que recorren estos relatos se enfrentan a la misma amenaza: la soledad, el estar solo como parte de la vida. La diferencia entre lo que se es y lo que se quiere ser, la marca profunda del pasado...y el amor.


Y es que el libro de JG Vásquez recuerda a Hemingway, a McEwan, a Borges...pero mantiene en todo momento una idiosincrasia propia que lo hace muy especial. Es más, logra conseguir algo muy dificil: mantener el espíritu de la novela corta, la sensación de plenitud, de escrupulosidad en todos los detalles y personajes... concentradas en unas pocas páginas. Ya te digo, una maravilla.

Único. Imprescindible.

1 comentario:

Lal dijo...

Qué buenisima pinta... a la lista va!